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Glorias deportivas: Ramón Fonst, nuestro primer medallista

Glorias deportivas: Ramón Fonst, nuestro primer medallista Ramón Fonst Segundo nació en la ciudad de La Habana el 31 de agosto de 1883 y, antes de cumplir los 10 años, fue llevado a París, donde se desempeñó en diferentes disciplinas deportivas, como el boxeo, sobre todo la especialidad "savate" (se usaban tanto las manos como los pies), muy practicada en Francia en esa época, y en la que obtuvo títulos otorgados por prestigiosas instituciones deportivas de la capital gala, Londres y Bruselas, la Sociedad Salvatores de París y el Colegio St. Charles, de Montecarlo. En ese período, además, Fonst practicó el ciclismo –en boga en Europa a fines del siglo XIX–, en el que recibió trofeos de primer orden, al someter a aventajados ciclistas del continente. De igual forma, incursionó en competencias de tiro con pistola y revólver, hasta conquistar 44 primeros lugares en el lapso de un año. Todo esto ocurrió siendo Fonst un adolescente, en los años previos a 1899, cuando decidió dedicarse por entero a la esgrima, deporte en el cual habría de acumular los más importantes títulos de su vida deportiva, como el de campeón mundial de espada en ese propio año. A partir de entonces, comenzó su trayectoria más conocida: primer cubano y latinoamericano que traspasó el umbral de los elegidos para conquistar una medalla de oro (espada), en la segunda edición de los Juegos Olímpicos de la Era Moderna, celebrados en París en 1900; títulos individuales de florete y espada –y de florete y sable por equipo– en las Olimpíadas de San Luis (Estados Unidos, 1904), para inscribir su nombre entre los dioses del Olimpo deportivo, al acumular cinco preseas doradas en este tipo de cita; títulos individuales en las tres modalidades de la esgrima, en los I Juegos Centroamericanos y del Caribe (México, 1926), hazaña que repitió en la segunda edición de estos certámenes (La Habana, 1930), pero solo en florete y espada. En los III Juegos (Panamá, 1938), con 55 años, fue factor decisivo para que el equipo Cuba se agenciara la primera plaza por conjunto, en espada. En 30 años de faena, cosechó 125 medallas y 25 trofeos, varios como premios o buenas actuaciones en boxeo tipo francés, y tiro. Se le considera el más grande esgrimista de todos los tiempos y uno de los atletas más integrales que ha conocido el deporte. Murió en su ciudad natal, el 9 de septiembre de 1959, a consecuencias de un coma diabético.

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